El Sistema de Posicionamiento Global (GPS), los drones y los Sistemas de Informa Geográfica (SIG) son nuevas herramientas que ayudan a procesar información geográfica.
El Sistema de Posicionamiento Global, GPS (Global Positioning System, por sus siglas en inglés) es un recurso de navegación satelital de precisión que, en 1973, el Departamento de Defensa de Estados Unidos de América desarrolló con fines militares. Sin embargo, a partir de la década de 1980 se puso a disposición de la población civil. El GPS permite posicionar con precisión lugares, objetos y personas sobre la superficie de la Tierra. Funciona mediante la red de satélites Navstar que orbitan alrededor de la Tierra a 20 000 km de altura y dan una vuelta cada 12 horas. Las señales que envían proporcionan una posición tridimensional de alta precisión, de manera permanente y en cualquier lugar del mundo.
El receptor las recoge y transforma en latitud, longitud y altitud; proporcionan, además, rumbos y rutas marítimas o terrestres y calculan la velocidad de vehículos en movimiento. Aunque es un instrumento de gran precisión, no está exento de errores, ya sea por la programación de los relojes, las interferencias atmosféricas, los reflejos en superficies terrestres, o por deficiencias en la señal satelital.
Los GPS permiten tener información al instante que contribuye a trasladarnos de un lugar a otro por avión, barco o carretera, y en diversos tipos de vehículos, inclusive en bicicleta o a pie, así como orientarnos y decidir las rutas que seguiremos hacia los lugares a los que no sabemos cómo llegar. El uso de los receptores GPS es parte de dispositivos de seguridad para localizar vehículos o cuerpos de agua, registrar la vegetación y la fauna de una región, o para la navegación aérea y marítima. Actualmente en los teléfonos celulares se utilizan para que los usuarios ubiquen su posición y sigan rutas a destinos muy diversos.
En 1987 cambió la forma de elaborar mapas por medio de computadoras: en Canadá se dio a conocer el primer Sistema de Información Geográfica (SIG); éstos son sistemas computarizados que integran un conjunto de herramientas diseñadas para la captura, el almacenamiento y el análisis de información acerca de las características del espacio geográfico. Los SIG permiten obtener la localización, distribución, extensión, tamaño y magnitud de cualquier componente geográfico, así como sus relaciones con otros componentes, entre otros aspectos. Los sistemas computarizados en los que se desarrollan los SIG tienen un funcionamiento interno que opera mediante distintos módulos:
1. Módulo de entrada, donde se capturan los datos sobre los componentes geográficos. La captura se realiza al ingresar información por medio de mesas digitalizadoras, escáner, teclados, importación desde internet o cualquier medio electrónico que aporte datos a la computadora (como mapas, bases de datos, imágenes de satélite). Allí se pueden visualizar y editar los datos geográficos.
2. Módulo de almacenamiento de la información, la cual se organiza en una base de datos. Un SIG incluye toda la información disponible sobre una región determinada (localidad, entidad o país). La información la recopilan y producen personas con intereses diferentes, de ahí que estos datos sean diversos. Sin embargo, quien diseña el SIG debe considerar que la información en su conjunto tiene que poder representarse en un mapa.